Thursday, April 2, 2009

tardío escándalo de Cancio en El Nuevo Herald

Wilfredo Cancio, pone el grito en el cielo por la inclusión (post-morten y por primera vez - según el articulo que publica El Nuevo Herald-) de un cuento del camagüeyano Carlos Victoria en una reciente antología editada dentro de los predios isleños.

Veo bien, que se llame la atención, en los medios, sobre las cotidianas violaciones a los derechos individuales por parte del cincuentenario régimen encabezado por los hermanos Castro. El problema es cuando estas denuncias no se basan (enteramente) en la realidad. Al parecer Cancio y los editores de El Nuevo Herald olvidan o desconocen que (al menos) la Gaceta (Literaria) de Cuba publicó hace ya mucho tiempo textos de Victoria, que fue precisamente donde por primera vez leí algo de él.

Gapar, El Lugareño

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Nota al margen: Recuerdo que en una de mis visitas a la Biblioteca Provincial de Camagüey, conversando con la directora (de turno) me enseñó en la primera gaveta de su buró todas las novelas de Carlos Victoria, y me dijo: "este es uno de los escritores que solo pueden leer mis amigos " ...

3 comments:

  1. y alguien me dijo un dia que misteriosamente TODOS los libros de Carlos Victoria habían desaparecido de dicha gaveta....

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  2. Seguro fue MIrthica quien se los embolsilló!!!!!!!

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  3. No sé si el escándalo de Cancio es tardío o no, pero eso no justifica LA RAZÓN de su escándalo. Ignoro lo de esos cuentos de Carlos en la Gaceta de Cuba aunque no los pongo en duda. Pienso que posiblemente lo desconoce al igual que yo.
    Que la directora de turno de la biblioteca guardara en su gaveta todos los libros de Carlos Victoria no quiere decir tampoco que los mismos estuvieran dispuestos en la sección de Circulantes. Tanto Carlos como yo como Nikitín como muchos otros leíamos libros que estaban en la biblioteca pero cuya lectura pública o préstamo no era "recomendado". Por lo general lo facilitaban personas que ya han fallecido.
    No sé si el "escándalo" de Wilfredo Cancio es bien o mal intencionado. No le conozco. Incluso considero que su queja es más bien ingenua porque la utilización de sus textos (CV) me la esperaba ya mucho antes.
    Hablo con TODA LA PROPIEDAD que me confiere ser, no ningún intelectual de última hora, sino parte de los que formábamos el cogollito de Camagüey (con CV) y podría darte toda clase de nombres para que después no me censures diciendo que allí no se tratan temas personales (ah, por cierto, a ese cogollito también pertenecía, en segundo plano, Elpidio Huerta).

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