(La Habana) Yerandee G. Durán expone sus "Ventanas"

texto y fotos por Sandra Ceballos

(para el blog Gaspar, El Lugareno)

En tarde del viernes hoy 12 de noviembre, la Galería Belkis Ayón, ubicada en la escuela de nivel elemental de Artes Plásticas José Antonio Díaz Peláez en el corazón del Vedado, abrió sus puertas y ventanas a, “Ventana”: presentación personal de la obra de un artista emergente cubano, Yerandee G. Durán.

Ahora -huellas de la ciudad que abandonaron un día su estabilidad hogareña para llegar a un basurero en cualquier esquina- estas ventanas (algunas antiguas, víctimas adorables del eclecticismo tropical de la arquitectura cubana) son el soporte de las pasiones, la estética y la agresión de este artista. Ellas están abiertas al mundo nuevamente como testimonio de un pasado, testigos de tantas historias y de generaciones, muchas, muchísimas que ya no están.

Allí, sobre paredes sin orificios que muestren el otro lado, parpadean sin tener que abrirse o cerrarse en el gesto y ambiciosas coquetean con la contemporaneidad, pero, a la vez también con esa consabida complicidad interactiva y secreta que genera la relación artista-obra. Nadie sabrá nunca cuál es la verdadera intención de Yerandee, tal vez ni él mismo lo sepa.

Amasando la estética hedonista del arte y los conceptos afiliados -casi siempre- a un universo investigativo, los artistas complejisan las ideas que creen representar con sus productos y muchas veces -casi todas las veces- no tienen una auténtica conciencia de las causas generadoras, que perversas y codificadas perseveran en la otra cara del cerebro, no obstante, las “Ventanas” de Y.G. Durán provocaron sensaciones intimistas y placer visual; mezclaron desenfadadamente a los artistas, curadores, estudiantes y amigos que acudieron a este evento, lleno de armonía, flashes de cámaras, licores y gratos encuentros.

Yerandee G. Durán

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