Tuesday, February 25, 2014

Crónica: Mi vecino Fernando Alvarez (por Waldo González López)

"Cantar es mi vida y, sobre todo, cantar boleros", me dijo en su última entrevista, poco antes de fallecer en 2002, este cantante admirado por todos los cubanos que peinamos canas... o no peinamos ya casi nada. 

Y me confesó además, cuando ni él, ni yo, ni nadie intuíamos su muerte: "Es mi mayor placer. Me deleita hacerlo. En esto llevo ya casi seis décadas y hasta el fin de mi vida seguiré haciéndolo".

A Fernando Álvarez, una de las clásicas voces del bolero cubano, cuando estaba en vísperas de sus fecundos 75 abriles (60 de ellos cantando), este cronista lo visitó en su apartamento, vecino al nuestro, pues vivía en el propio edificio, durante los últimos años de su exitosa existencia en la preferencia del público amante de la canción y el bolero en su distintiva voz.

Entonces me contó diversas cosas, como que empezó a los 16 años como profesional en su querida Santiago de Cuba, pero desde muy niño, durante los recreos en la Escuela Primaria José de la Luz y Caballero, sus condiscípulos le pedían que cantara. Asimismo, me confesó que, desde muy chico, oía numerosos boleros en su hogar, sobre todo los interpretados por Antonio Machín, pues su familia amaba la música. Su mamá y sus tías asistían a los oficios del abuelo, que era pastor de la iglesia.

UN MÚSICO A FONDO

Nacido en la oriental ciudad de Santiago de Cuba, el cuatro de noviembre de 1928, el mítico bolerista iniciaría su vida musical como cantante en orquestas profesionales, en las que era vocalista, por ejemplo, de la Orquesta de Pancho Portuondo, de la que luego pasara al jazz-band de Mariano Mercerón. 

Con cierta tristeza me confesó, además, que no pudo estudiar música: ni una clase recibió en su vida, pues "había mucha hambre y debíamos trabajar en lo que fuera. En el Parque Dolores y en otros lugares de Santiago, con sus tres hermanos hacían de todo: limpiar zapatos y autos, vender periódicos..., lo que fuera. Con el tiempo, su hermano Robertico sería bailarín y Eddy, también músico, tocaría con la Orquesta Sensación, en la que también estaban Pacho Alonso y Benny Moré, quien lo llama a la Habana en 1952 para que integre su flamante Banda Gigante. Asimismo pasa al Conjunto Casino. Más tarde se dedicó a trabajar como solista, especialmente en el ámbito bolerístico del felling, donde alcanzó éxitos en Cuba y otros países. 

“EL BENNY ERA MI SEGUNDO PADRE"

Así me expresó el cantante de hermosa voz, quien añadió que en la orquesta de Mariano Mercerón cantaba con su admirado Benny Moré y Pacho Alonso. Un día el Benny le habla para hacer la Banda Gigante en La Habana... Tuvo la suerte de que se interesara desde muy temprano en él y su voz.

El Benny, siempre respetuoso, tras hablar con sus padres, llevó con él a La Habana al entonces adolescente. El muchacho estuvo durante cuatro años y medio en su fabulosa Jazz Band. Con el Benny grabó la voz prima en el coro de la Banda e incluso hasta se la prestó para grabar con la Panart, por lo que ya lo conocían cuando fue a México. 

Y, aun admirado, me relató algo impensable en otros, pero normal en él clásico autor y cantante de tantos géneros: cuando Roberto Faz se va del Conjunto Casino, le hablan para integrarlo, se lo dice al Benny y el gran sonero y bolerista, le responde: “Compadre, no lo piense dos veces, porque al lado mío usted no va a ser una verdadera estrella”. 

Me recalcó que hizo por él cosas increíbles, desde llevarlo a La Habana hasta confiar en él ciegamente. Asimismo, me afirmó que El Benny, como cantante, era un genio: lo cantaba todo y como nadie. Solo lo comparaba con Carlos Gardel y Libertad Lamarque, “voces y estilos que no se darán nunca más con tal calidad. Por eso los tres son clásicos, afirmaría”.

ANECDOTARIO PARTICULAR

Fernando vivía en casa del Benny, del que era su chofer, se ocupaba de lo que hiciera falta. Lo cuidaba con celo. Eran tanta la comprensión y la afinidad mutuas, que un día le dijo: "Compadre, si yo tuviera un hermano como tú, qué feliz sería".

Era tal la confianza del Benny en Fernando, que cuando tenían un bailable y se demoraba por algo (él, tan conversador, se detenía en cualquier esquina a compartir con cualquiera y ya se olvidaba hasta de que lo esperaban "sus muchachos", como los llamaba), el joven amigo dirigía la Banda hasta que él se incorporaba, y entonces sí que subía la temperatura de los bailadores.

Con el Conjunto Casino, Fernando Álvarez estuvo cerca de cuatro años. Con esta agrupación grabó varios números como solista, entre ellos “Ven aquí a la realidad” y “Venganza”, que gustaron mucho, hicieron época, al punto de que merecieron un Disco de Oro en 1959.

Pero otros títulos exitosos fueron también: “La noche de anoche”, “Me recordarás”, “Llanto de luna”, “Si no eres tú”, “Humo y espuma”, números de grandes autores, los mejores; entre otros: Tania Castellanos, José Antonio Méndez, Portillo de la Luz, Jorge Mazón, Chelo Velázquez, Adolfo Guzmán, Yáñez y Gómez...

Y me contaría, además, que por el Conjunto Casino pasaron otros grandes, como Roberto Faz, Orlando Vallejo y otros cantantes muy buenos. El recién fallecido Bebo Valdés, le hizo un sello sonoro con su valiosa orquesta Sabor en la disquera Gema (de Guillermo Álvarez Guedes), con la que grabó “Verdad amarga” con Chucho Valdés al piano, su debut disquero.

UN ESTILO PECULIAR

Cuando le pregunté que pensaba de su voz y estilo peculiares, respondió que esa era su voz natural: “ella y su estilo vinieron conmigo".

Pero siguieron mis preguntas:

¿Cuáles fueron en su juventud sus preferidos?

-Frank Sinatra y Bing Crosby, y en Cuba, Miguel de Gonzalo.

Su voz evoca la de otro bolerista preferido, Vicentico Valdés. ¿Cómo era Vicentico Valdés, maestro?

-Era mi hermano, una bella persona, con su carisma particular y un estilo que me gustaba mucho. Fue muy fiel a los autores cubanos, como Marta Valdés, Piloto y Vera, entre otros. Guardo el más hondo recuerdo suyo, ya que cuando fui a Nueva York a cantar con Libertad Lamarque, en el Teatro Puerto Rico, él, Arsenio Rodríguez y Panchito Riset fueron a recibirme al aeropuerto.

“¿Que cómo era Panchito, el hombre y el cantante? Pues tan sencillo, tan noble, tan buen amigo... Lo mejor lo tenía él. Y como cantante, era excepcional. Lo conservo en mi memoria con genuino cariño. A Marta Valdés la admiré y admiro mucho. Fui el primero en grabarle un número: “No es preciso”. También le grabé “No te empeñes más” y “Para qué rectificar?”

CANTAR CON LOS GRANDES

Siempre modesto, me dijo con la sencillez de los genuinos, que tuvo la suerte de cantar con muchos de los grandes de Hispanoamérica. Como con sus admirados y queridos nombres de Libertad Lamarque, el Benny y Vicentico. Pero cantó también con Pedro Vargas, Pedro Infante, Lucho Gatica, Boby Capó, Pablo del Río, Juan Legido, Miguelito Valdés, el dúo Irrizari de Córdova y Sonia Silvestre. Y con los cubanos Esther Borja, Olga Guillot, Fernando Albuerne, Rosita Fornés, Omara Portuondo y Elena Burke, entre muchos otros que admiraba y con los que se llevaba muy bien.

El prestigioso bolerista visitaría desde muy joven innumerables países, cuya sola mención sería casi imposible. Las últimas giras fueron a Francia y Panamá, donde en abril de 1991 triunfó en el Evento Magnum ("fue el cantante que más gustó al público", según declaró el director de este importante encuentro internacional). Asimismo, sus premios fueron incontables.

Y ya despidiéndome, le pregunté cómo quería lo recordara su público.

Sin pensarlo dos veces, aseveró: “Como un humilde cantante de boleros que le ha dado algunas satisfacciones a ese público tan bueno, y al que aún no le he reciprocado todo lo que él me ha dado a mí. Pero lucharé por darle aún mucho más. Espero vivir lo suficiente para cumplir esta promesa”.

DESPEDIDA

Sin embargo, no pudo cumplir su promesa de más vida el humanísimo Fernando Álvarez, del que a su muerte, en el ya lejano 2002, expresara hermosas palabras el también importante compositor y colegamigo recién fallecido Senén Suárez (del que también escribí otra crónica, publicada en esta columna de los martes por mi amigo Joaquín Estrada-Montalván). Así, dejó escrito el igualmente sencillo y grande Senén: 
Fernando Álvarez fue un cantante con estilo casi único, es así que lo sentimos en su largo trayecto de 75 años aproximadamente sin un descanso. Yo lo conocí personalmente bastante tarde y cuando me mudé para el Vedado habanero, una vecina me enseñó un LP donde él, entre otras magnificas canciones, había grabado mi bolero “Eres sensacional” con la orquesta de violines del maestro Bebo Valdés. Puedo agregar que me sentí satisfecho por aquella interpretación

---------------------------------------
WALDO GONZÁLEZ LÓPEZ (Puerto Padre, Las Tunas, Cuba. 1946) Poeta cubano, ensayista, crítico literario y teatral, antólogo y periodista cultural. Graduado de Teatro en la Escuela Nacional de Arte (1971) y Licenciado en Literatura Hispanoamericana, Universidad de La Habana (1979).
Hasta el 2011, cuando abandonó la Isla para venir a residir a Miami, integró la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), en sus Asociaciones de Poesía, Literatura para Niños y Teatro.
Laboró en la Escuela Nacional de Arte (donde impartió clases de Historia de la Literatura para Niños y Jóvenes, en la Cátedra de Teatro para niños fundada por él y la actriz y directora escénica María Elena Espinosa, y de Historia del Teatro Universal y del Teatro Cubano, también creó el Archivo de Dramaturgia).
Recibió importantes distinciones por su quehacer como escritor y periodista. Colaboró con publicaciones cubanas y extranjeras con ensayos, artículos, crónicas y poemas. Sus versos han sido traducidos al inglés y francés y publicados en revistas de EUA y Francia, así como ha publicado poemarios en México y Colombia, y un volumen de ensayos sobre lectura y literatura en Ecuador.
SÍNTESIS BIOGRÁFICA:
Estudia el preuniversitario en la ciudad de Holguín y lo abandona para trasladarse a la capital, donde primero cursa el idioma francés, luego estudia Teatro en la Escuela Nacional de Arte (ENA) y, más tarde, la carrera de Literatura Hispanoamericana, en la Universidad de La Habana, de las que se graduó, respectivamente, en 1969 y 1979.
Integró el Centro Cubano de la Asociación Internacional de Teatristas para la Infancia (ASSITEJ, auspiciada por la UNESCO); las Asociaciones de Artistas Escénicos y de Escritores de la UNEAC (Secciones de Poesía, Traducción Literaria y Literatura para Niños y Jóvenes). Fue Asesor del Teatro Nacional de Cuba.
En la Isla, publicó una quincena de poemarios, un volumen de ensayo, dos de crítica literaria y otro de crónicas, así como diversas antologías de poesía y poesía para niños, décima y décima para niños, cuento y teatro.
Ha traducido del francés, entre otros, a los importantes poetas Jacques Prévert, Marie de France, Molière y Joachim du Bellay. En 1994 apareció su antología París at night, del poeta francés Jacques Prévert (con selección y traducción suyos) Asimismo, en 1994 le solicitaron versiones de textos de importantes poetas de Polonia, luego incluidas en la antología Poesía polaca (Editorial Arte y Literatura, 1994).
Tradujo y dio a conocer en Cuba a la importante poeta contemporánea canadiense Denise Boucher, ex Presidenta de los Escritores de Québec, de quien vertió al español varios textos, publicados en un número especial de la revista Casa de las Américas.
Ensayos suyos fueron incluidos en varias antologías como: Nuevos críticos cubanos, Acerca de Manuel Cofiño y Valoración múltiple: Onelio Jorge Cardoso.
Su labor como poeta, ensayista, crítico y antólogo ha sido reconocida entre otros, por las pedagogas y antólogas puertorriqueñas Flor Piñeiro e Isabel Freire de Matos en su Literatura Infantil Caribeña; el profesor y ensayista jamaicano Keith Ellis, residente en Canadá, en su estudio Cuba’s Nicolás Guillén: Poetry and Ideology, y el antólogo y ensayista español Antonio Merino en su Nueva poesía cubana.
En el ámbito nacional, diversos ensayistas y críticos de prestigio se han ocupado de sus múltiples libros. Así, el ensayista, poeta y narrador Antonio Gutiérrez Rodríguez, quien en su volumen Estudios sobre la décima, incluye un estudio sobre sus espinelas.
En Cuba, fue jurado consuetudinario en eventos literarios, teatrales y de periodismo cultural, y participó en Congresos de la UNEAC, foros y otros encuentros con especialistas nacionales y de otros países.
Desde 1990 hasta 2001, fue periodista cultural de la revista Bohemia. Antes laboró en otras como Mujeres y Muchacha, de la que fue uno de sus fundadores en 1980.
INTERÉS POR LA POESÍA:
Un buen día de su adolescencia y, sin las muchas lecturas que vinieron después, tras leer El reino de este mundo, de Alejo Carpentier, su novela que más le sigue gustando, escribió su primer poemario (inédito) “A ras del tiempo”, a partir de hechos de realismo mágico y de lo real maravilloso, acontecidos en nuestra América fabulosa. Tal fue su iniciación seria con la poesía.
RECONOCIMIENTOS:
Diploma al Resultado Científico por su Colaboración a la nueva Historia de la Literatura Cubana, en tres volúmenes, otorgado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente.
El Laúd y la Medalla del Cucalambé, impuestas por el Poder Popular provincial de Las Tunas.
El Diploma por la Labor Realizada en Apoyo a la Décima, concedida por la Universidad “Camilo Cienfuegos”, de Matanzas.
Reconocimiento por su labor Escritor y Crítico Literario otorgado por la Presidencia del Instituto Cubano del Libro.
Medalla “Raúl Gómez García”.
Primera Mención, Concurso “Plural” (México, 1990) a su poemario Salvaje nostalgia.
Premio "13 de Marzo" 1976, Universidad de La Habana, a su poemario para niños “Poemas y canciones”, publicado en 1977.
Premio “La Edad de Oro” de Canción para Niños.
Primera Mención Concurso “La Edad de Oro” a su poemario Poemas y canciones.
BIBLIOGRAFIA ACTIVA
SELECCIÓN DE SUS POEMARIOS:
Salvaje nostalgia (Mención Concurso “Plural”, México, 1991; publicado en Cuba ese año).Casablanca (Colombia, 1995). Las palabras prohibidas (antología de su poesía, entre 1983 y 1995; Cuba, 1997). Ferocidad del destino (2010). Espinelas con espinas (décimas, 1981).Que arde al centro de la vida (décimas, 1983), Estos malditos versos (décimas, México, 1999; Cuba, 2001.
CRITICA LITERARIA:
Escribir para niños y jóvenes (1983). La décima dice más (2004). La décima, ¿sí o no? (2006).
CRONICAS:
Niebla en la memoria (1990).
POEMARIOS PARA NIŇOS:
Poemas y canciones (1977). Donde cantan los niños (1983). Jinetes del viento (1989). Libro de Darío Damián (décimas, 1995).Voces de la querencia (2004).
ANTOLOGIAS DE TEATRO:
La soledad del actor de fondo (primera antología del monólogo teatral cubano), 1999. Teatro cubano de fin de siglo (cinco piezas en un acto, 2001).
OTROS LIBROS.
Entre el 2001 y el 2011 publicó, además:
Viajera intacta del sueño. Antología de la décima cubana (2001). Añorado encuentro. Poemas cubanos sobre boleros y canciones (2001). Este amor en que me abraso. Décimas de José Martí (2003). De tu reino la ventura. Décimas a las madres (2003). Que caí bajo la noche. Panorama de la décima erótica cubana (2004). La lectura, ese resplandor (antología de textos sobre literatura y lectura, (Ecuador, 2009). Esta cárcel de aire puro. Panorama de la décima cubana en el siglo XX (en coautoría con Mayra Hernández Menéndez; Editora Abril, en 2 volúmenes: 2009 y 2010).
LIBROS ÍNÉDITOS:
Libro de Rodrigo Damián (poesía para niños).
EN MIAMI:
Desde su arribo a Miami en julio de 2011, ha tenido una amplia participación en la vida cultural y en numerosos eventos, como los siguientes:
2011
-El teatrista y creador de la web teatroenmiami.com Ernesto García lo invita a colaborar con esta página (premiada por Google) y le ofrece una columna.
-Integra el jurado de la primera edición del Festival de Teatro de Pequeño Formato, de la Compañía ArtSpoken, dirigida por Yoshvani Medina.
-Conforma el equipo de colaboradores del anual Festival del Monólogo Latinoamericano, de la Compañía Havanafama, dirigida por Juan Roca.
-Es invitado a colaborar con la revista digital Palabra Abierta, por su fundador: el narrador, poeta y ensayista cubano Manuel Gayol Mecías.
2012
-Merece el Tercer Premio de Poesía del X Concurso Internacional “Lincoln-Martí”.
-Invitado por el destacado teatrista Matías Montes Huidobro, lee su ponencia «Nostalgia y crítica en la dramaturgia de Cristina Rebull», en el Congreso Internacional «Celebrando a Virgilio Piñera», celebrado del 12 al 15 de enero en la Universidad de Miami.
-Es invitado a colaborar en el blog Gaspar. El Lugareño, por su creador Joaquín Estrada Montalván.
2013
-Invitado por la Presidencia del Gremio Artístico Latinoamericano. GALA (integrada por la teatrista boricua Maddy Rivera y el escritor cubanoamericano Antonio Armenteros) integra la nueva agrupación.
-A petición de la Presidencia de GALA, funge como Jurado del Concurso Internacional de Poesía «Facundo Cabrales».

No comments:

Post a Comment