
Interrogado por ZENIT sobre quienes eran los que desviaban la teología de la liberación dándole una matriz marxista, el sacerdote peruano respondió: “No Boff, no Sobrino, no Juan Luis Segundo, no Ronaldo Muñoz, o sea, diría que los teólogos no” y añadió que “claro, hubo gente muy comprometida antes y que tenían una base teológica, pero no eran los que hacían teología”.
Añadió que “muchos de ellos era gente muy generosa, lo que no significa tener razón”. Y añadió que “un seguimiento político hubo en algunos países”. Y cuando se dice dimensión política precisó que se entiende “una dimensión política extraviada, incorrecta y hay siempre gente así”.
El padre Gutiérrez consideró además, que en los días de hoy existe un clima más favorable, “sí, porque se saben mejor algunas cosas, en teología las ciencias sociales antes no aparecían nunca. Hace más de cuarenta años cuando nació la teología de la liberación estas estuvieron presentes y no solamente la filosofía. Hoy en día los estudios bíblicos están llenos de sociología y nadie dice nada, porque se acostumbraron”, dijo.
Respondiendo a una periodista indicó que “el clima y el contexto ha cambiado mucho, los temas de la teología de la liberación están más presentes”, como “pobreza, justicia”. En particular dijo, “la idea que los mismos pobres tienen que ser los agentes de su liberación, y este fue un punto que estuvo desde el inicio de la teología de la liberación”.
Si pudiera volver hace cuarenta años atrás, le preguntó ZENIT, ¿haría las mismas cosas o cambiaría algo? “Nunca lo he pensado -respondió Gutierrez, porque las cosas que uno vive no dependen solamente de uno, creo que no haría lo mismo, porque ésto significaría que el ambiente habría sido el mismo”. Y sobre lo hecho concluyó: “Nunca lo he lamentado”.
Interrogado por Angela Ambroggetti, de Korazym, sobre Juan Pablo II y Rátzinger, y cuál tuvo más problemas con la teología de la liberación, el sacerdote peruano calificó el encuentro en Roma con Ratzinger hace siete años atrás, en el 2007, como “muy bueno”.
Añadió que “Ratzinger era más teólogo, comprendía más y eso ha sido muy importante. Yo honestamente puedo decir que su comprensión caminaba porque sabía de que se trata, desde el inicio” porque sabía “que no era la idea del marxismo”. (sigue)