Former Soviet leader Michail Gorbachev and his wife Raisa (R) with former U.S. President Ronald Reagan and his wife Nancy, at the Reagan ranch in the Santa Ynez mountains near Santa Barbara on May 3, 1992. (Credit: REUTERS/Blake Sell/FILE BS/GN)
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Un amigo de estos “pagos”, ciertamente una persona a quien admiro por su clara inteligencia, y mejor información, me ha relatado la anécdota de lo que vivió en su primera visita a Moscú en 1987. Lo que me relataba de aquella experiencia al entonces todavía país de los soviets, es creo entender, una de esas señales, que no deberíamos obviar, de los tiempos de este aquí y ahora.
Mi amigo llegaba a Sheremetievo, justamente cuando lo hacía también, en visita ciertamente histórica, el entonces presidente de los Estados Unidos Ronald Reagan, acompañado de su esposa Nancy, y de una muestra de arte de altos quilates, conformada por obras impresionistas de puntería, que la primera dama acopiara en el Moma y en el Museo de Arte de Chicago.
La Gorbachova, primera dama soviética, había correspondido, allegando por su lado lo mejor de tal período artístico que se pudiera encontrar en el Hermitage y lugares conexos. El resultado fue una Exposición que envidiaría el mejor connossieur de este mundo, y que mi amigo, un hombre de formación clásica, admiró a sus anchas.
Por estos lares, y teniendo de telón de fondo la esperadísima visita del actual mandatario norteamericano, Barack Obama, sus esposa e hijas, no creo queramos quedarnos por detrás, y ya anunciamos a bombo y platillo, la presencia de un equipo de beisbol de las Mayores, para que tope amistosamente con la contraparte cubana, en un histórico juego que tendrá por sede el afamado coliseo beisbolista del Cerro, ante la presencia de los líderes de ambas naciones, y de supongo, y creo no errar en mi predicción, una multitud de “bien escogidos” fanáticos, que aquí todo el mundo sabe lo que pasó cuando los Orioles nos visitaron para un suceso similar, y como las miles de locaciones del stadium “se repartieron” convenientemente. Vivir para ver….
Pero los sucesos de estos “idus de marzo”, tampoco se quedan allí, pocos días después, sólo los habaneros, otra vez el fatalismo geográfico, serán partícipes del concertazo del siglo cuando la afamada banda británica The Rolling Stones, tomen por asalto “las areas aledañas” a la Ciudad Deportiva habanera, según rezan los comunicados oficiales del día. Sólo los que ya peinen canas, recordarán que la banda estuvo censurada entre nosotros en los sesentas y tempranos setentas, cuando junto a los Beatles, y otros grupos foráneos que cantaban en la entonces “inconveniente “ lengua de Shakespeare, prohibida igualmente en los planes de estudios. Los que oyeron sus discos de entonces, copiados clandestinamente, corrían el riesgo de ser severamente amonestados y considerados “ personas con problemas ideológicos”, un sanbenito que cerraba ipsofacto cualquier oportunidad en los medios oficiosos……Pero los tiempos cambian, y, si se quieren “novedades” lo que no hay es que morirse…se verán horrores……
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