Tuesday, April 12, 2022

"Galápago", una ingenua y profunda fábula teatral para estos tiempos (por Baltasar Santiago Martín)



Si hacer teatro para “los locos más grandes” es siempre un desafío para cualquier escritor, director o actor que se respete – y si es comedia, mucho más, por aquello de que “hacer reír es mucho más difícil que hacer llorar” –, intentarlo para “los bajitos” –con hermosa moraleja además para padres, familiares y demás adultos que vean la obra– es mucho más “arriesgado”; y esa es exactamente la primera gran virtud –que no la única– de la puesta de Galápago, esta “ingenua y profunda fábula teatral para estos tiempos”, como ya adelanté desde el título para elogiarla: el que la actriz y novel directora Yani Martín haya decidido reincidir haciendo teatro para niños, algo tan necesario y a la vez tan poco común por nuestros predios.

Y dije “reincidir”, porque esta no es la primera reseña que escribo sobre una obra de teatro para niños de ¡todas! las edades presentada por Yani, pues en enero de 2021 lo hice sobre Los mosqueteros y una princesa moderna, de la cual dije lo siguiente, totalmente aplicable a Galápago: “A ningún niño de los muchos presentes hubo que obligarlo a quedarse sentado viéndola, y al final, yo diría que todos quisieron tomarse una foto con los actores, en vez de querer marcharse enseguida para sus casas”.

Yani Martín, directora de la obra 
y presidente de Para bajitos, 
con dos pequeños espectadores.
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Texto de la autoría de Salvador Lemis, escrito por él a los 20 años de edad, cuando trabajaba con Flora Lauten en el Grupo BUENDÍA y era estudiante del Instituto Superior de Arte de La Habana, Galápago tuvo un éxito inmediato al ser leído en el I Encuentro de Dramaturgia de Camagüey, para luego ser solicitado por numerosos colectivos teatrales.

Estrenada la obra en 1983, paralelamente en Cuba y España, ha tenido más de 200 estrenos, con muchísimas funciones de temporada, en Ecuador, España, Italia, Alemania, México, Honduras, Guatemala, Islas Galápagos, Venezuela, Argentina, Chile, Estados Unidos y Cuba, entre otras naciones, y es considerado el texto cubano más representado de todos los tiempos.

Steven Salgado como el Cocodrilo 
y Lester Martínez como Gali
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Como no basta solo un buen texto para que una obra teatral sea un éxito, toca hablar ahora del elenco que tuvo a su cargo la responsabilidad de llevarlo a escena el día del estreno, la tarde del sábado 2 de abril: Lester Martínez (Gali), Tamara Melián (la Abuela, la Gaviota y el Cartel); Bruno Gatti (el Papagayo y el Burro) y Steven Salgado (el Cocodrilo y el Cangrejo), sin dejar de mencionar que la niña María Fernanda también compartió el papel de Gali con el experimentado Lester Martínez en la siguiente función y en otras además, pero no tuve la oportunidad de verla; no obstante, considero un gran acierto y un atractivo añadido el que Yani apostara por una actriz infantil para el protagónico de esta obra, con tanto texto a memorizar, actuar e interactuar a la vez con el público.

Bruno Gatti como el Burro
 y Lester Martínez como Gali
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Todos jugaron convincentemente con sus personajes como si fueran niños grandes otra vez, con lo que demostraron con creces su ductilidad, su pasión y su compromiso con el oficio que han escogido para vivir a plenitud –aunque tengan que completar sus entradas con otras labores menos artísticas–; y aplaudo también que cada quien mantuviera su acento “de fábrica” y que se intercalaran palabras y frases en inglés, porque esa es la realidad de este Miami tan “babelizado” y “netflixado”, en que las series españolas marcan dicha feliz tendencia, con argentinos y mexicanos hablando como tales con los españoles.

Tamara Melián como la Gaviota 
y Lester Martinez como Gali
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Para finalizar –y no por ello menos importante–, quiero agradecer el diseño escenográfico, de vestuario y de utilería de Pedro Balmaseda y Jorge Noa (Nobarte); celebrar la alegre música incidental de Dennys Perdomo; así como el diseño gráfico de Román Fernández y la producción musical de Osamu Menéndez, todo ello bajo la dirección de la versátil Yani Martín, porque gracias a su excelente trabajo de equipo fue posible que la magia del teatro se apoderara del escenario del teatro del Paseo de las Artes del Hotel Regency de Lejeune Avenue y cautivara a su complacida audiencia de niños de todas las edades



Baltasar Santiago Martín
Fundación APOGEO para el arte público.
Hialeah, 10 de abril de 2022

Fotos: Cortesía de Yani Martín, presidente de Para bajitos.

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