Oh! tú, del Camagüey Apóstol santo,
¡Qué con luz de la Verdad rompiste
De la ignorancia el tenebroso manto,
Y con tu noble propaganda hiciste
Extremecer al déspota de espanto!
Sal del sepulcro á ver el pueblo opreso
Cual de sus grillos ya sacude el peso,
Y á ver el campo obscuro que labraste
Do en cada surco pródigo sembraste
La fecunda semilla del progreso!
¡Cuál brota por doquier! ¡Con qué riqueza
En los montes prolífica germina
¡Cuán vívida y lozana en la colina! ...
En vez de ortiga la áspera maleza,
¡Cuánta flor de fragancia peregrina!
!Mas el fruto mejor de la cosecha
Que en nuestro corazón creció lozano
De libertad fué el soplo soberano,
Que hizo en las masas aguzar la flecha,
La misma con que Tell hirió al tirano!
No comments:
Post a Comment