La Hoja Diocesana del Obispado de Camagüey. Un testimonio de la iglesia en el año 1953. (por Carlos A. Peón-Casas)

A nuestra vista y la de el lector tenemos hoy esta publicación eclesial del Obispado camagüeyano fechada en Marzo del año 1953, regido entonces por el que fuera tercer obispo diocesano: Carlos Rius Anglés.

La publicación recogía para tal fecha la vida y el accionar de los católicos camagúeyanos, y el emprendimiento constante por dotar a la extensa diócesis de nuevas obras entre escuelas, capillas y templos.

De un vistazo se podían recorrer como en la gráfica que lo testimonia y compartimos, aquellos logros inequívocos, que y eran a saber:

el Colegio del Sagrado Corazón del Central Francisco, la Capilla en construcción del apeadero de Lugareño, obra de celo del Pbro. Dr. José Rodríguez, la Escuela Parroquial de Morón para niños, la iglesia de Ntra. Sra de la Caridad en Florencia, la fachada de la Iglesia Parroquial de Vertientes, con su nueva torre, la Escuela Católica del Central Violeta, la del Reparto Saratoga de Camagüey y la nueva fachada y marquesina en la casa parroquial de Nuevitas.

Otra reseña importante aparecida en aquel número 4 de la Hoja Diocesana, en la sección de Crónica Diocesana, refería a la bendición y colocación de la primera piedra de la Iglesia que se dedicaría a la Virgen de Fátima, que empezaba a construirse en el reparto Vista Hermosa de la ciudad principeña desde septiembre del año anterior.

Las referencias del acto precisaban que:

Precediendo a la bendición que fue oficiada por el Exmo y Rmo. Sr. Obispo, asistido por los PP Salesianos, celebró la Santa Misa en los propios terrenos en que se construye el nuevo templo, ante un altar primorosamente decorado con bellas flores que rodeaban a una devotísima Virgen de Fátima propiedad de la piadosa dama Margarita Betancourt V. de Agramonte. El Rmo. Prelado pronunció, después del Evangelio, una fervorosa plática alusiva al acto, y agradeció a Doña Margarita su generoso donativo de 10,000.00 que entregó después de la bendición, a la Sra. Presidenta del Comité Organizador.

La fachada de la Iglesia Parroquial de Vertientes,

con su nueva torre

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De entre los sucesos relacionados se daba cuenta de:

La fiesta patronal de la parroquia de Vertientes, solemnizada con un magnífico programa de actos... y la bendición y estreno de la flamante torre parroquial y restauración de la fachada del templo, la solemne Misa de Comunión y la cantada, la procesión magnífica y sin precedentes en la localidad y floreciente Parroquia, toda vestida de fiesta para honrar a su celestial patrona la Sma. Virgen de la Medalla Milagrosa. Todas las calles estaban engalanadas para el paso de la procesión. y coincidiendo con la fiesta patronal, se inauguró ese día el espacioso parque construido allí por el Municipio.

Valga la mención que el entonces joven párroco a cargo de aquellas proezas era el joven sacerdote Adolfo Rodríguez Herrera, nuestro inolvidable Monseñor Adolfo, primer Arzobispo de la futura Arquidiócesis de Camagüey.

Referencias igualmente destacadas merecían la inauguración en el Central Francisco, de la escuela del Sagrado Corazón de Jesús, "levantada allá gracias al tesón y voluntad ejemplares de un Comité que presiden los esposos Fanjul Lamar."

Para los actos de Bendición acudieron junto al obispo, los padres Pedro Fernández Capella del Central y José Ma. Juaristi, Capellán del Colegio Teresiano de Camagüey. Otros asistentes incluían "al Alcalde de Santa Cruz del Sur, con la Banda de Música, que acompañó a los alumnos del Colegio en su espléndido desfile."

Al cierre de aquella Crónica Diocesana se daba cuenta de otra noticia muy esperada, la colocación y bendición de la Primera Piedra para otra nueva iglesia, la de Elia.

El Exmo Sr. Obispo bendijo y colocó la piedra angular del nuevo templo ante una gran concurrencia, entre la que destacaba un grupo simpático de 300 niños y niñas de la Catequesis que atienden en aquella población piadosas damas franciscanas, bajo la dirección de los PP. Franciscanos encargados de aquella jurisdicción.

Para el cierre de aquella publicación Diocesana se consignaba una referencia a las obras de restauración de la Santa Iglesia Catedral.

Ya para ese minuto las obras avanzaban. De tal suerte se refería a la instalación de un nuevo cancel de la puerta mayor, "obra de magnífica talla que realza la entrada del templo, así como el decorado y dorado de los altares de la Dulcísima Patrona Nacional Virgen de la Caridad y de Jesús Nazareno. De igual manera la pintura interior y exterior quedará completada dentro de varios días."