Wednesday, August 2, 2023

Agramonte escribe a su madre desde la manigua camagüeyana. Septiembre 19 de 1870. (por Carlos A Peón-Casas)


Las cartas íntimas de Agramonte a su madre, como las que dedicara a su esposa Amalia, son un testimonio ciertamente insondable y revelador del alma del guerrero, del hijo, y del esposo amantísimo.

A la que aludimos hoy, descubrimos esas coordenadas, e igualmente los avatares a veces inenarrables de la separación, y de la consiguiente falta de noticias de uno y otro lado.

Sabida era la cierta precariedad de aquellos correos subrepticios que corrían lás más de la veces la pérdida inexorable de las misivas, en azarosos viajes marítimos entre ambas y distantes riberas.

En el caudillo, y en sus inspiradas palabras, laten también las esperanzas irrevocables de conseguir llegar hasta la madre y la familia toda, y retomar con ellos la vida siempre deseable en la paz y la quietud del hogar tan anheladas. Así principia su misiva con esperanzadoras palabras:
Continúo sin novedad alguna, y continúa la guerra siempre con tesón y esperando yo que un triunfo pronto nos permita dar un buen abrazo a mi Mamá y a cada uno de los hermanos, colgar la espada, y volver a aquella vida de familia tan dulce, sacrificada durante la Revolución en aras de la independencia de la patria.
Sabemos por esta misiva del Mayor a su madre que, Amalia Simoni, luego de ser capturada junto al pequeño vástago, nacido entre los fragores de las batallas y la azarosa y dura sobrevivencia, ya había recién arribado a Nueva York en aquel casi mismo minuto:
He sabido que Amalia llegó a Nueva York en los primeros días del mes pasado y supongo que habrán tenido el gusto de verse cuando quizás Ud no lo esperaba.
Lo que leemos a continuación en palabras del padre y del esposo ejemplar es un testimonio de profundo cariño, encomendando a su madre el cuidado encarecido a la esposa y al hijo que las circunstancias le alejaban de su cuidado:
Cuídemela mucho y cuénteme cuando me escriba cómo se halla, lo detalles de su primera entrevista, todo lo que ella haya pasado y todo lo que le ha parecido mi nieto.¿Verdad que es muy gracioso?
A los hermanos y al padre también le encomienda les deje su amor incondicional:
Un abrazo a mis hermanos, a Mercedita, a Pepa y a Manuel y dígales que siempre los tengo presentes y que no por ser soldado ahora dejo de quererlos como antes…
Para cerrar pide a su mamá lo bendiga, con la misma emoción a no dudarlo de sus años de infante, cuando acaso aún tierno adolescente, también hubo de separarse de su lado en sus experiencia de estudios por la Madre Patria:
Y Ud mi Mamá, reciba el afecto y acendrado cariño de su más amante hijo que le pide la bendición.
A no dudarlo, esta misiva es un texto que nos fundamenta los apegos y los afectos del hijo, del esposo, y el padre que convivieron con pasión en la ejemplar vida de nuestro adalid camagüeyano, y que nos lo devuelve imperturbable en su magnífica condición humana.

No comments:

Click here to visit www.CubaCollectibles.com - The place to shop for Cuban memorabilia! Cuba: Art, Books, Collectibles, Comedy, Currency, Memorabilia, Municipalities, Music, Postcards, Publications, School Items, Stamps, Videos and More!

Gaspar, El Lugareño Headline Animator

Click here to visit www.CubaCollectibles.com - The place to shop for Cuban memorabilia! Cuba: Art, Books, Collectibles, Comedy, Currency, Memorabilia, Municipalities, Music, Postcards, Publications, School Items, Stamps, Videos and More!