XXXIII Feria Internacional del Libro
de Minería en México DF
por Ena Columbié
La XXXIII Feria Internacional del Libro de Minería se lleva a cabo desde el 22 de febrero al 5 de marzo en el Palacio de Minería, cita en Tacuba, 5 en el centro histórico de la ciudad de México. Dicha feria acogió una vez más en su primera etapa (desde el Jueves 23 al domingo 26 de febrero) a las Escritoras Latinoamericanas en Minería, el espacio que gracias a la enjundia y perseverancia de la poeta Odette Alonso, se realiza para debatir los problemas de la mujer dentro de la literatura continental americana, y también, para mostrar lo mejor de la creación de esas mujeres.
El jueves 23 y como apertura del ciclo se presentaron dos libros: Luna zoológica de la legendaria escritora mexicana Reyna Barrera, quien es doctora en letras, egresada en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, Catedrática del colegio de Literatura Dramática y Teatro, y maestra fundadora del colegio de Ciencias y Humanidades. Su obra literaria se mueve entre la narrativa, la poesía y el teatro; y Diosas de la yuca de la dominicana Marianela Medrano residente en New York, una doctora en psicología, que en su práctica profesional incorpora la literatura como una modalidad de sanación, a través de la escritura terapéutica. Sobre sus libros hablaron la poeta Odette Alonso y la narradora Zaida Corniel respectivamente.
Una hora después, la polémica ocupó la Galería de Rectores, donde se reunieron las escritoras Marianela Medrano (República Dominicana), Natalia Arisrtizabal, (Colombia), y las cubanas Ena Columbié y Odette Alonso. Un público goloso curioseó a la interrogante lanzada por la Alonso ¿Literatura de mujeres o mujeres en la literatura? En general se habló del puesto ganado por la mujer en el marco de las letras, sobre el cambio de pensamiento, y los nuevos planteamientos temáticos despejados de tabúes, como la masturbación, la violación etc. Temas que no solo sirven de escape, sino que son el vehículo de denuncia contra la agresión a la mujer; las panelistas invitaron a los hombres a que también escribieran también sobre ellos.
El viernes 24 se dedicó a las Sáficas. En el Auditorio Sotero Prieto, las poetas representadas por Patricia Toledo (Honduras), Natalia Aristizabal (Colombia) y Aura Sabina (México), leyeron poesía lésbica y luego respondieron a muchas preguntas, a un público que pendiente de lo que se hablaba, fue receptivo y más conocedor de lo que muchos pudieran imaginar. Faltó como las veces anteriores, el tiempo para extenderse sobre un tema neurálgico de nuestra sociedad.
Más tarde la Galería de Rectores se engalanó con la presentación de la Antología de poesía cubana del exilio, compilada por Odette Alonso, y la que yo considero, la más completa y abarcadora de todas las antologías que sobre el tema, se han publicado hasta el momento; porque su cantidad es muestra de un minucioso trabajo de Odette, además del rigor de selección y calidad que contiene la misma. La lectura se llevó a cabo por Ernesto Olivera, Odette Alonso y Ena Columbié, que comenzaron a modo de homenaje, leyendo los poemas de Eliseo Alberto, Osvaldo Navarro y Elena Tamargo, poetas queridos y antologados que ya fallecieron. Una segunda ronda fue para algunos poetas ausentes. Luego se incorporó a la mesa Ernesto Fundora, a quien las inclemencias del tránsito de la capital lo tenían nervioso pensando no llegar a tiempo. Entonces apasionado disertó sobre el dolor en la poesía de los exiliados, y se unió en la última rueda para leer los poemas personales que aparecen en la selección. Como siempre el tiempo fue poco para responder al auditorio todas sus inquietudes.
El Sábado 25 tocó la Lectura de narradoras latinoamericanas, Leticia Romero (México), Patricia Toledo (Honduras), Zaida Corniel (República Dominicana) Ena Columbié (Cuba) y Odette Alonso como vocera. Realmente sorprendente sobre todo los cuentos de las narradoras jóvenes, que se están abriendo puertas con un discurso sólido, montado en las técnicas del cuento tradicional, pero yéndose hacia la forma más moderna. Sobresale entre ellas Patricia Toledo. También en la tarde del sábado se presentaron dos libros
Ciudad Oculta de Minerva Salado, presentado por Ena Columbié (
http://elexegeta.blogspot.com/2011/06/la-vida-es-el-viaje-por-la-ciudad.html) y
Solitar (
http://www.ellugareno.com/search?q=la+feria+de+Mineria) de esta última presentado por Minerva Salado. Ambas leyeron e interactuaron con un público ávido de conocer el intríngulis de la nueva poesía. Cerrada la tarde fue el turno para las
Ensayistas latinoamericanas, con las voces de las inteligentes escritoras mexicanas Elena Madrigal, Leticia Romero, María Elena Olivera, y Odette Alonso como moderadora.
El Domingo 26 cerró el ciclo por todo lo alto. En el salón Manuel Tolsá se presentó el último poemario de Odette Alonso
Víspera del fuego (
http://elexegeta.blogspot.com/). Para contarnos sobre el proceso de publicación, allí estuvieron sus editores Héctor Alvarado y Livier Fernández Topete, dueños de
Ediciones Intempestivas de Monterrey.
Más tarde se hizo un sentido homenaje para honrar la vida y obra de Eliseo Alberto (Lichi), en la que Minerva Salado, Ernesto Fundora y Carlos Olivares Baró, guiados por Odette Alonso, hicieron el personal homenaje. Estaban presentes amigos y familiares de Lichi.
Y para cerrar la larga y exitosa jornada, se realizó una Lectura de poetas latinoamericanas, con las escritoras que participaron a lo largo de esos días.
Resumen
La gran cantidad de actividades que se realizaron en el ciclo de Escritoras Latinoamericanas supo a poco; pero ese sentimiento tiene su razón. El público que acude a las presentaciones del Palacio de Minería es un público culto, conocedor, amable, interesado… que hace sentir bien al escritor, no solo porque esta presente llenando las salas y auditorios, y comprando libros; sino porque escucha y pregunta, se interesa sobre los diferentes temas de creación, y su amabilidad ética es un sello de alta calidad. Un público que en su mayoría joven, resulta un buen augurio. Me queda en el recuerdo de una niña de 15 años, que después de comprar mi libro me pidió que se lo dedicara, cuando pregunté su nombre me respondió
no señora yo no entiendo muy bien lo que usted dice, pero lo que si sé, es que a mi mamá le va a encantar su poesía, por favor dedíqueselo a ella. Dos días después, otra niña casi de la misma edad, me llevó un libro de su madre, con el correo electrónico de aquella escrito en la página principal, y me pidió:
Por favor léaselo y escríbale a mi madre, yo se lo agradeceré mucho, por favor. He ahí el México que se me metió en la sangre, el de los jóvenes inquietos que harán un futuro mejor que el presente que hicieron el de hoy. El México de Fernando Macotela
Director de la Feria Internacional del Libro de Minería, que nos abraza a los escritores contento de tenernos allí, y nos agradece infinitamente,
Porque ustedes son los que hacen esto, dice abriendo los brazos, sin percatarse que él es la verdadera montaña. Hay que escucharlo hablar con humildad y emoción de los inicios, y de como ya el espacio se le hace pequeño. El México de Sylvia mujer sabia y de principios y de Mayra (que ya es más mexicana que cubana), las que me mostraron con orgullo comprensible, el
Museo de Antropología, centro y raíz de los ancestros mexicanos, y me regalaron un espacio en su preciosa familia. El México de la dulce Margarita, que estuvo cargando mis bolsos, sirvió de apoyo para mi adolorida rodilla, y se hizo cargo de la mayoría de imágenes que captó mi cámara y que hoy aparecen aquí. El de la gentil Xochil. El México que cobija a mi hermana Odette, a Félix, a Carlos, a Ernesto (a los dos), a mi hermano el cantante Topete que me dio seguridad y me enseñó mucho de lo que conocí. El mismo México que quedó tan arraigado en Lourdes Porrata, que casi no esperó que yo llegara a Miami para llamarme:
para que me cuentes Pitu. Así estoy yo, marcada para siempre por ese
México lindo y querido, que me permitió conocer tanto talento de nuestra Latinoamérica y hacer un nuevo puñado de amigos. ¡Gracias México!.
Fotos/Margarita Baez
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Ena Columbié, “LaPitu” Guantánamo, Cuba. Poeta, ensayista, crítica, narradora y artista. Licenciada en Filología. Ha obtenido numerosos premios en crítica literaria y artística, cuento y poesía. Ha publicado los libros: Dos cuentos (Narrativa. Cuba 1987), El Exégeta (Crítica literaria. Cuba 1995),Ripios y Epigramas (Poesía Cuba 2001) y Ripios (Poesía. USA 2006) y en las antologías: Lenguas Recurrentes (1982), Lauros (Cuba 1989), Epigramas(Cuba1994), Muestra Siglo XXI de la poesía en español (USA 2005), La Mujer Rota (México 2008). Dirige la editorial, Ediciones EntreRíos. Ha colaborado como editora en la editorial La Araña pelúa de París y en La Peregrina Magazine, así como en diversos proyectos privados independientes.Como fotógrafa ha publicado en revistas y periódicos de USA. Reside en Miami, Florida. USA.