Tuesday, April 4, 2023

¿Le cuento a mi pareja que me atrae otra persona? (por Cecilia Alegria, La Dra. Amor)

Nota del blog: Espacio semanal de Cecilia Alegría, La Dra. Amor, dedicado al amor de pareja



Hay tres vértices en la pirámide amorosa que hacen que las relaciones de pareja funcionen: la Fidelidad y la Confianza unidas por la Comunicación. 

Fidelidad y confianza son como las 2 caras de una misma moneda. Si una de ellas tambalea, es muy probable que el amor que sentíamos por la otra persona deje de manifestarse en nuestra relación.

Se supone que cuando hay suficiente Confianza en una relación comprometida, y ambos se han sido fieles, lo recomendable sería que no se guardaran secretos.

Entonces es cuando aparece la complicad pregunta: ¿Podemos o debemos contarle a nuestra pareja que nos atraen otras personas?

Tener pareja no anula nuestra capacidad de sentir atracción y, por tanto, nos podrían atraer otras personas, aunque tengamos una relación de pareja estable y hasta extraordinaria.

El sentimiento de atracción hacia alguien no es como un interruptor que tú conectas o desconectas cuando quieres. Tiene que ver con la química cerebral, con las sustancias químicas, neurotransmisores y hormonas que entran en ebullición cuando esa persona se nos acerca. No podemos decidir de manera consciente si alguien nos atrae o no, ni tampoco cuándo quiero que una persona me atraiga. Se siente sin más, surge de manera natural y obedece a patrones mentales.

Ahora bien, lo decisivo es qué se hace con ese sentimiento de atracción. Cada persona es responsable de manejarlo como desea. Puedes dejarlo ahí, sin más, sin alimentarlo ni dar una oportunidad para que crezca y se transforme en algo más que simple atracción; o puedes darle un espacio en tu vida y potenciarlo, haciéndolo más grande, convirtiéndolo así en una amenaza para la continuidad de tu relación de pareja. Y entonces el asunto se convierte en altamente peligroso.

Hay una línea que separa la atracción del amor, pero es muy fina y si te la saltas entrarás en un terreno que podría poner en riesgo tu relación de pareja estable, sobre todo cuando en tu relación ya hay problemas y las cosas no funcionan del todo bien. Es en estos casos cuando con mayor probabilidad optarás por no poner freno a la atracción que sientes.

¿Entonces, se lo cuento o no?

Sería bueno que todas las parejas estuvieran igual de evolucionadas para que pudieran hablar abiertamente de este tema, pero la realidad no es así.

Si hay que contárselo o no a nuestra pareja dependerá del nivel de desarrollo en el que se encuentre la relación de pareja.

Voy a darte un ejemplo: José y María está casados. María invita a una amiga frecuentemente a la casa y José se siente atraído hacia ella. Entonces él se atreve a decirle a su esposa: “Mi amor, preferiría que no invites a tu amiga a casa porque siento cierta atracción por ella y no quisiera que este sentimiento crezca… Mejor se reúnen en casa de ella o en otro lugar… Quiero serte fiel inclusive con mis ojos y mi pensamiento”.

Tal honestidad debiera afianzar la confianza entre los dos, si María es una mujer inteligente y segura de sí misma. Él no le oculta nada ... ¿qué más pedir?

En una relación sana, simétrica y equilibrada, donde existen los tres ingredientes: Fidelidad, Comunicación y Confianza, podríamos comunicar a nuestra pareja que nos sentimos atraídos por otra persona con total naturalidad, porque ambos sabemos que sentirse atraídos por alguien no significa que se sienta amor. Y, además, los dos tienen claro que su pareja no alimentará esa atracción ni la hará crecer porque hay un pacto de fidelidad.

En cambio, en una relación menos evolucionada, contar a nuestra pareja que nos atrae otra persona puede causar graves problemas y generar celos y desconfianza. 

¿Qué tipo de relación es aquella en la que no existe plena confianza en tu pareja? ¿Es realmente una relación de pareja o es otra cosa? ¿Qué harías tú de encontrarte en esa situación?





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Cecilia Alegría, La Dra. Amor (www.ladoctoraamor.com): Consejera de Parejas, Love and Life Coach, Conferencista Internacional, Periodista y Conductora de Radio y TV. Destaca en los Medios Latinos en Miami dando consejos sobre cómo triunfar en el terreno amoroso y ayudando a miles de parejas a resolver sus problemas. Forma parte del grupo fundador de profesores del programa Universidad de la Familia.
Ha publicado nueve libros entre los que se encuentran:Comunicación Afectiva=Comunicación Afectiva (Espasa Calpe, España, 2000). 120 preguntas y respuestas para ser mejores personas (Editorial Norma, Colombia, 2004), No hay amor más grande (Editorial Aragón, USA, 2012), Amando un Día a la Vez (Ediciones Varona, U.S.A. 2015), Al rescate de tu comunicación de pareja (Ediciones Varona, USA 2017), Sexo Sagrado y Lazos del Alma (Indie Publishingnbsp, 2018), Alessia (Book Master Corp. 2019) El Poder del Amor Ágape: como restaurar tu matrimonio después de una infidelidad (2021),  Amanecer con Dios (2021), Del Amor Tóxico al Amor Extraordinario (2022).

"Ultimas Criadas"... desde el teatro la denuncia. (por Wilfredo A. Ramos)



“Nadie instaura una dictadura para salvaguardar una revolución, sino que la revolución se hace para instaurar una dictadura”
George Orwell (escritor, periodista y crítico británico).


“Quien quiera obtener un poder absoluto no tendrá que hacer uso de la violencia, sino de la libertad del otro”
Byung-Chul Han (ensayista y filósofo surcoreano).




Entre las diversas ofertas entregadas durante la recientemente finalizada séptima edición del Festival Internacional de Teatro Casandra, estuvo la puesta en escena de la obra “Ultimas Criadas”, un profundo trabajo de intervención dramatúrgica, sobre el texto original del francés Jean Genet, “Las Criadas”, el cual viera su estreno en 1947, que bajo la dirección de Erom Jimmy, subió a las tablas del Sandrell Rivers Theater. el pasado día 23 de Marzo, en una lamentable única función.


Como bien sabemos, esta obra del autor galo es considerado su trabajo más conocido y el de mayor presencia en los escenarios de todo el mundo. Según algunos, explora sin concesiones la dialéctica de la opresión, a su vez que explora también sin ambigüedades el odio que conduce inexorablemente hacia un crimen. Todo ello, claro está, desde una visión ideológicamente relacionada con la lucha de clases, partiendo de las propias experiencias del autor, las cuales lo llevarían a abrazar diferentes causas políticas a través de su bastante caótica existencia.

Si bien en el texto de Genet, la trama nos lleva al encuentro de dos criadas, que estableciendo un desajustado nivel de dependencia una de la otra, van a mostrar una relación envidia-odio-poder desde y hacia la señora para la que trabajan, culminando en un plan para asesinarla, algo que se verá absurdamente frustrado, dando al traste con los deseos de estas dos obsesionadas mujeres, deparando un final no imaginado, la entrega de Erom Jimmy, nos arrastrará hacia otros derroteros inesperados, aunque valiéndose de iguales soportes en la acción dramática.

Del mero conflicto privado, particular y existencial, en la obra gala, esta nueva propuesta nos sumergirá en la tragedia a la que convocan el poder, la obediencia, la sumisión, el desacato, el miedo, la represión, trasladado al conflicto entre los habitantes de un país y sus gobernantes.

El autor ha sabido re-escribir dicho texto, para sin convertirlo en un muy temido discurso panfletario, denunciar la ya demasiado extensa situación de penuria y calamidades, que bajo la presión de un régimen lapidario, ha sumergido al pueblo cubano desde hace más de seis décadas.

Si bien el escritor y dramaturgo cubano Virgilio Piñera nos habló de “... la maldita circunstancia del agua por todas partes...”, refiriéndose a la limitante situación geográfica de la isla, Erom Jimmy, retoma esa masa líquida para situarla como muro de contención, que también de prisión y de muerte, en que se ha convertido ese mar para los nacidos en esas tierras de la Mayor de las Antillas.


Tratando de poner al pre-espectador en perspectiva ante lo que verá en escena, el programa de mano nos dice: “La casa se convierte en una especie de isla diabólica donde se concentra el odio y el deseo de venganza ante un poder casi perpetuo e irrevocable...”, con lo que pretende inducirlo, desde antes que se corra el telón, a formar parte de esta lectura despiadada, agria, que de seguro removerá las entrañas del dolor de muchos, haciendo desempacar recuerdos vividos dentro de nuestra siempre añorada ‘isla-cárcel’.

La obra francesa que habla del poder, como de un juego de espejos, ha tenido siempre una dimensión que desborda sus iniciales intenciones. Desde sus renglones se desprenden lecturas variadas, adaptables a un sinfín de abarcadoras realidades, poseedoras todas ellas de premisas coincidentes y al mismo tiempo multiplicadoras de eventos que envuelven al ser humano en la lucha por su existencia. Es por ello que para nada puede resultar extraña esta nueva lectura dada a su trama, que se ha aprovechado excelentemente de su discurso original. Podríamos decir, sin temor a equivocarnos, que pocas veces podemos estar en presencia de una re-escritura dramática que se aproveche de manera tan certera de su original.

Lo anterior me atrevo a expresarlo, a pesar de no ser un convencido totalmente, como he expresado en otras oportunidades, de lo acertado de intervenir textos de otros autores que ya han demostrado su eficacia y valía en la escena mundial; pero en el caso que nos convoca, su lectura primero y su visualización sobre las tablas después, me hizo, por primera vez, analizar a fondo la validez de este acto, encontrando por el contrario, que en esta ocasión el mismo, engrandece aún más el objetivo con el que fuera escrito el texto de Genet, otorgándole al mismo reconocimientos de intemporalidad y universalidad.


Reconozco que este nuevo texto, nos provoca el continuar con un análisis de mayor profundidad y más exhaustivo; pero sin duda ese debiera ser el material para otro trabajo, tal vez más académico, dirigido tal vez a otro grupo de lectores -si es que aún existen- interesados en estos temas de reflexión conceptual teatrológica.

Pasemos pues a lo visto sobre el escenario.

De acertada manera, Erom Jimmy, desde su altura de director, tuvo la idea de cambiar la disposición público-escenario, partiendo de las variadas posibilidades que el espacio de este teatro, el Sandrell Rivers posee, utilizando las gradas como escenario para colocar al público a nivel del piso, aunque no obstante se debe decir que ello entorpeció en cierta medida la visión del escenario, debido a quedar todos los espectadores colocados sobre un mismo nivel.

Esa distribución escogida para la organización de la sala, nos hizo recordar a la de los teatros de la antigüedad clásica griega y romana, sólo que de manera inversa, como si en esta oportunidad los espectadores estuvieran sobre el escenario y los actores se movieran sobre las altas gradas que rodeaban aquellos edificios, por lo que al entrar se podía sentir una fuerte impresión teatral.


Llamativo resulta de igual manera ver todo el espacio escénico forrado de papel periódico, lo que junto a una gran ventana central -elemento primordial para el texto- y a una gran cantidad de maletas de viajes amontonadas en el centro de las gradas-escenario, conforman el conjunto del diseño escenográfico. No podemos pasar por alto la larga y simbólica alineación de barquitos de papel que separan escenario y espectador con su carga más que simbólica...

Dianet Conde
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Nabilah Fernández
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Para llevar a cabo este trabajo, el director se ha valido de la presencia en escena de dos actrices, una con cierta trayectoria sobre nuestras tablas y otra haciendo su debut escénico en esta ciudad, Nabilah Fernández la primera y Dianet Conde la segunda, serán las encargadas de asumir los roles de las temibles criadas y hermanas: Clara y Solange. Ambas acompañadas por María Alejandra Guerra, Lorena Moll y María Victoria Machado, jóvenes estudiantes pertenecientes a la Sociedad Actoral Hispanoamericana, quienes incorporan en conjunto el rol de la Señora, en una muy acertada concepción de dirección.

En este punto debemos detenernos y agradecer la idea de concebir el personaje de la patrona, que provoca todos los odios y envidias, además de personificar el poder para aquellas que bajo su control se encuentran, interpretado por tres actrices. Al hacer esto se convierte a dicho personaje en una especie de ‘hidra de tres cabezas’, que aunque hablando a una sola voz, reforzando la poderosa e indispensable figura del coro griego, van a tener además cada una su propio momento de frontal soliloquio, destacándose el que realiza la joven Guerra, quien con potente y bastante definida voz, muestra un prometedor temperamento escénico.


Mostrando interés, en marcar el contexto de la acción con más carga simbólica, la utilización de tres niños en escena a manera de silenciosos comodines, suponen una gran responsabilidad en el trabajo escénico, reforzando el contenido intertextual del mensaje. Isabella Simón, Carlos Nazco y Caroline Sánchez, alumnos del taller de Teatro de la Compañía para Bajitos, con sus vestuarios que los identifica como estudiantes de escuelas cubanas, llevan a cabo un sorprendente, difícil y disciplinado trabajo sobre el escenario, que se sale de su rango de edad y de la posible preparación que ellos puedan poseer.

Pero volvamos la mirada nuevamente hacia las dos actrices responsables de conducir esta historia.


Nabilah Fernández, actriz cubana graduada del Departamento de Teatro de la Universidad de Puerto Rico, en su campus de Río Piedras, ha subido en algunas ocasiones a nuestros escenarios -no en la frecuencia suficiente, que a nuestro entender mereciera estarlo- habiendo demostrado el innegable compromiso con su profesión

Como ya señalamos, esta actriz incorpora el personaje de Clara, la criada que tanto en el texto original, como en esta re-escritura, mantiene la dependencia y supeditación a su despótica y controladora hermana, pero siendo la que al final aporta el giro dramático que impacta y define a ambos textos, que en el caso que nos ocupa, envuelve en un lamentable manto de pesimismo el futuro cubano.

Fernández se desenvuelve con agilidad por los inconvenientes niveles del escenario, añadiendo cierta plasticidad felina a sus movimientos, como si con tal incorporación estuviera encubriendo desde el inicio el sorpresivo zarpazo final que realizará su personaje. Intérprete con buena proyección de voz, dicción y fraseo, en esta oportunidad sin embargo, debido tanto a un estado gripal de última hora, como también al trastocado espacio de representación, lo cual atentaba en buena medida contra el trabajo de las voces, resultó por momentos difícil poder escuchar con claridad algunos de sus parlamentos. No obstante, la actriz propuso un trabajo de una fortaleza escénica vital y determinante para el éxito de su desempeño sobre las tablas...


Por otra parte, Dianet Conde, joven actriz cubana con estudios en el Instituto Superior de Arte (ISA), los cuales tuvo que abandonar a punto de graduarse debido a las presiones recibidas ante su inminente salida del país, quien como ya dijimos anteriormente, asumió su primer trabajo entre nosotros, mostró un desenvolvimiento en escena acorde a los requerimientos de una puesta la cual exige un extremo trabajo corporal, aspecto que define el quehacer de este director, el cual pide grandes cuotas de preparación física a sus actores. Del mismo modo incorporó su personaje con la energía y la arrogancia propia de la caracterización correspondiente al mismo.

Aunque ya habíamos hablado de las dificultades del espacio de representación en cuanto a que se pudieran escuchar bien las voces en el escenario, debemos añadir que en el caso de dicha actriz sus problemas con la voz fueron algo más allá.

Erom Jimmy, Diredtor.
Foto/Wilfredo A. Ramos
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En su caso en particular, se pudieron distinguir algunas dificultades en la dicción, exceso de velocidad al decir ciertos parlamentos en momentos de gran tensión dramática y caída del volumen de la voz en finales de frases, haciéndolas casi inaudibles en ocasiones. Dichos contratiempos, lamentablemente, son situaciones que se encuentran bastante extendidas -más de lo aceptable- en un numeroso sector de los jóvenes actores provenientes en la actualidad de la isla. Algo no se está haciendo realmente bien en aquellas instituciones que tan excelentes profesores, dedicados al trabajo de la voz, tuvieron tiempos atrás.

El que no se hubiera contado con el tiempo necesario para el proceso de montaje y ensayos de esta obra, algo que sobrepasa la normalidad en el habitual trabajo teatral de nuestra ciudad, tanto como el que ésta haya tenido la posibilidad de realizar solamente una única función, sin duda ambas situaciones, atentaron en contra de la necesaria concreción de un mejor ritmo sobre el escenario, aunque todos los implicados se entregaron, con sus mejores recursos, a lograr una puesta que debe quedar como referente del teatro de Miami.


A modo de resumen, tenemos que agregar que al disfrutar de un espectáculo de tal complejidad y fuerza en sus diálogos, producto de la interesa y testarudez de su autor, al tomar un texto considerado un clásico del teatro mundial, deconstruyéndolo, interviniéndolo, re-elaborándolo, entregando un nuevo producto, el eco del grito de denuncia se alcanza a escuchar más allá del escenario, estando en presencia de un documento de verdadera trascendencia artística y política para no perder de vista.



Fotos/Roberto Daguerre

Lic. Wilfredo A. Ramos
Miami, Abril 3, 2023


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Fotos/Wilfredo A. Ramos
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Monday, April 3, 2023

Se van (un poema de Félix Luis Viera)

Nota: Cada lunes la poesía de  Félix Luis Viera.  Puedes leer todos sus textos, publicados en el blog,  en este enlace.  Traducción al italiano de Gordiano Lupi.



Cada vez que mira pasar una muchacha
piensa en otra muchacha conocida
que ya no es una muchacha;
hace toda una triste trama novelística
cada vez que mira pasar una muchacha.
Hay cabellos de muchacha y dientes y sonrisas a
  a todo lo largo de esa última calle
(ya va por la última calle, es lo cierto);
los senos como naranjas de las muchachas que
  pasan
y que se parecen a las otras que ya no son
  muchachas
le entristecen el enfisema y la espina dorsal;
¿qué será de tantas muchachas en el mundo sin
  nadie que las ame como él?;
es terrible, cae la lluvia, en la última calle,
sus ojos buscan la neblina de una carne perdida,
hace una triste trama novelística:
mira, como si se mirara lejos,
al amante de la muchacha que pasa y que no es él,
   piensa en otra conocida
que ya no es lo que ésta, piensa
en tantas cosas
que no tienen nada que ver con la realidad que
  va ocurriendo
en las piernas como lumbres de la muchacha
  que pasa;
nunca imaginó que hubiera tantos misterios en
  la última calle
o que tantos se pudieran inventar transitando por
  ella,
cae la lluvia,
ésta pasa,
y también la otra,
ésta se va,
y también la otra;
se van.


Julio de 1989



Se ne vanno


Ogni volta che guarda passare una ragazza
pensa a un’altra ragazza conosciuta
che non è più una ragazza;
inventa una triste trama da romanzo
ogni volta che guarda passare una ragazza.
Ci sono capelli di ragazze, denti e sorrisi
  in ogni angolo di quest’ultima strada
(già percorre l’ultima strada, questo è certo);
i seni come arance delle ragazze che
   passano
e che assomigliano ad altre che più non sono
   ragazze
gli rattristano l’enfisema e la spina dorsale;
che sarà di tante ragazze nel mondo senza
   nessuno che le ami come lui?;
è terribile, cade la pioggia, nell’ultima strada,
i suoi occhi cercano la nebbiolina d’una carne perduta,
inventa una triste trama da romanzo:
guarda, come se guardasse lontano,
l’amante della ragazza che passa e che non è lui,
   pensa a un’altra conosciuta
che non è più questa, pensa
a tante cose
che non hanno nessun rapporto con la realtà che
   sta accadendo
nelle gambe come fuochi della ragazza
   che passa;
mai immaginò che ci fossero tanti misteri
   nell’ultima strada
o che tanti si potessero inventare
   percorrendola,
cade la pioggia,
questa passa,
e anche l’altra,
questa se ne va,
e anche l’altra;
se ne vanno.


Luglio 1989







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Félix Luis Viera (El Condado, Santa Clara, Cuba, 1945), poeta, cuentista y novelista, es autor de una copiosa obra en los tres géneros.

En su país natal recibió el Premio David de Poesía, en 1976, por Una melodía sin ton ni son bajo la lluvia; el Nacional de Novela de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, en 1987, por Con tu vestido blanco, que recibiera al año siguiente el Premio de la Crítica, distinción que ya había recibido, en 1983, por su libro de cuento En el nombre del hijo.

En 2019 le fue otorgado el Premio Nacional de Literatura Independiente “Gastón Baquero”, auspiciado por varias instituciones culturales cubanas en el exilio y el premio Pluma de Oro de Publicaciones Entre Líneas..

Su libro de cuentos Las llamas en el cielo retoma la narrativa fantástica en su país; sus novelas Con tu vestido blanco y El corazón del rey abordan la marginalidad; la primera en la época prerrevolucionaria, la segunda en los inicios de la instauración del comunismo en Cuba.

Su novela Un ciervo herido —con varias ediciones— tiene como tema central la vida en un campamento de las UMAP (Unidades Militares de Ayuda a la Producción), campos de trabajo forzado que existieron en Cuba, de 1965 a 1968, adonde fueron enviados religiosos de diversas filiaciones, lumpen, homosexuales y otros.

En 2010 publicó el poemario La patria es una naranja, escrito durante su exilio en México —donde vivió durante 20 años, de 1995 a 2015— y que ha sido objeto de varias reediciones y de una crítica favorable.

Una antología de su poesía apareció en 2019 con el título Sin ton ni son

Es ciudadano mexicano por naturalización. En la actualidad reside en Miami.

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Gordiano Lupi, periodista, escritor y traductor, nació en Piombino, Italia, en 1960. Fundador, en 1999, junto con Maurizio y Andrea Maggioni Panerini de la editorial La Gaceta Literaria, ha traducido del español a varios autores cubanos, como Alejandro Torreguitart Ruiz, Guillermo Cabrera Infante, Félix Luis Viera y Virgilio Piñera, entre otros. Cuenta en su haber con un amplio trabajo sobre figuras del cine, entre ellas Federico Fellini, Joe D´Amato y Enzo G. Castellari. Ha publicado más de una decena de libros que abarcan diversos géneros, como Nero tropicale, Cuba magica, Orrore, ertorismo e ponorgrafia secondo Joe d´Aamto y Fidel Castro – biografia non autorizzata.

Gordiano Lupi es un luchador por la democracia para Cuba y un promotor de las artes y la cultura de la Isla.

Prólogo del volumen "Poesías", de Nieves Xenes (por Aurelia Castillo de González)


Prólogo del volumen "Poesías", de Nieves Xenes, editado por la Academia Nacional de Artes y Letras, leído por el Académico señora Aurelia Castillo de González, en la sesión solemne celebrada en la Academia de Ciencias en memoria del Académico fallecido señorita Nieves Xenes, la noche del 29 de diciembre de 1915.

Temo que mi pluma, cansadísima ya y nunca experta en juicios literarios, sea insuficiente para hablar de Nieves Xenes con las palabras que debidas le son. Un deber académico es lo que me ha inmpuesto con insinuante ruego, haciéndome en ello grande honor, el digno Presidente de la Sección de Literatura, señor José ManuelCarbonell, y trataré de cumplirlo.

Si para dar cima a la delicada empresa únicamente fuese menester el sentimiento de acendrado afecto, ya estaría yo tranquila respecto a mi suficiencia, porque entre Nieves Xenes y yo, desde que en las amenas y muy provechosas Conversaciones literarias tenidas en casa del que fué entusiasta propulsor de las patrias letras, doctor José María de Céspedes, nos conocimos el año de 1885, hasta la muerte de la poetisa, ocurrida el día 8 de este mes de julio en que escribo, jamás una sombra, jamás un leve desvío puso tibieza en aquel afecto hondamente sentido por las dos almas. Nieves se retiró del mundo hace años —sin que el mundo se hubiese retirado de ella—; en todo ese tiempo nos habíamos visto pocas veces, pocas también nos habíamos escrito; no obstante, la amistad y el aprecio permanecían idénticos, segurísimos, confiados.

Pero no es el afecto lo que ha de guiar ahora mi pluma, sino la imparcialidad más estricta y lo que en mis facultades quede aprovechable.

Muchas veces, al tratar de personas ilustres, se hace necesario tender piadosos velos sobre la vida íntima, o declarar francamente los lunares, las faltas graves que la afearon. Cabe la satisfacción al hablar de Nieves —y esto es ya una ventaja— de poder mostrar su corta historia, transparente como cristal: nada es preciso disimular en ella.

En el hogar paterno ángel fué pronto a toda abnegación. Quizás los desvelos e incesantes afanes durante la prolongada y penosísima enfermedad última de su madre, a la que solamente ha sobrevivido siete meses, hayan contribuído en gran manera a quebrantar un organismo, sano y fuerte hasta entonces, dejándole indefenso contra la muerte, que tras brevísima lucha, lo aniquiló. Ella, Nieves, que en la vida había sentido el pánico del choque supremo, cuando la muerte se le acercó, miróla de frente sin espanto alguno, serena y dulce, como lo fué en todos sus actos. "Yo hubiese querido, decía, vivir aún unos cuatro años; pero ya vale más salir de esto", y, sin agonía, dirigiéndose a uno de sus familiares, dijóle: "¿No ves que me estoy muriendo?" y con leve contracción facial, expiró.

Su corazón estaba formado para amar con vehemencia; pero el destino fué cruel para con ella en este sentido. No le permitió los deliquios de la virgen prometida, no los púdicos arrobos de la esposa bien amada, no las ternuras sublimes de la madre. Esos afectos fraguados, se concentraron en su alma, adquiriendo enorme fuerza, y sus cantos de amor la hicieron émula de la inmortal poetisa griega.

¿Tuvo ese amor un objeto real? Ella me dijo más de una vez que esos cantos eran "ideas poéticas" y nada más. Lo decía con la sonrisa fugaz que la bondad hacía aparecer en sus labios, y que la íntima melancolía cortaba instantáneamente, como si se espantase de una profanación, como si ella no debiese sonreír jamás. El mundo piensa, tiene por seguro, que amó un imposible, un imposible para su virtud. Sus más hermosos versos dan la razón al mundo. Y a este propósito repito lo que antes dije: No hay que tender velos sobre la vida íntima de Nieves.

El ahogado sentimiento materno tuvo también magníficas válvulas para expansionarse del bello corazón al exterior. Fué madre de menesterosos. Las dádivas pasaban sigilosa y continuamente de las buenas manos a las manos temblorosas que la bendecían. Difundíanse los beneficios en torno suyo como delicadas violetas difunden la esencia que nos extasía, sin que la flor aparezca a nuestra vista.

Y estos sentimientos humanitarios no partían —bueno es consignarlo— de fuente artificial alguna; quiero decir, de creencias religiosas, porque ella no las abrigaba; sino que brotaban directamente, como linfa limpidísima, del fondo de su alma inmaculada.

Fué también madre de seres más íntimamente vinculados a ella. Los hijos de su hermana María tuvieron en Nieves segunda madre, quizás, debido a su exaltadísimo temperamento de artista, más vehemente que la otorgada por la naturaleza. La última vez que hablé con ella, cuando el duelo por su madre, decíame, refiriéndose a esos niños. "Sí, las otras tías los quieren también, pero no con el frenesí que yo". Esta frase, dicha con su habitual, perfecta tranquilidad, hízonie gracia y me quedógrabada en la memoria.

Jamás he conocido modestia igual a la modestia de Nieves. Sus recitaciones en la tertulia de Céspedes obtenían calurosos aplausos. De los más renombrados poetas y escritores nuestros, aun estando lejos de Cuba, como Santacilia, recibía constantes muestras de la admiración que excitaban sus versos. Obtuvo premio en bien nutrido certamen por hermosa composición, El Poeta, y se la obsequió con medalla de oro por el soneto Julio, de insuperable belleza, honor compartido con otra gran poetisa, la señora Borrero de Luján. Ella no se convencía: era la única que no sabía nada de su gran valer. Con la mayor indiferencia abandonaba por dondequiera y perdía muchas veces sus joyas literarias. De nada servían los ruegos de sus familiares para que las coleccionase e imprimiese. Por último, dejó de escribir. Pareció olvidarse de que en su alma había cuerdas que vibraban divinamente, sólo con que ella lo quisiese.

¿Entraba en esto algún desdén por los nuevos métodos poéticos, tan falseados por muchos jóvenes, que toman lo accesorio por lo esencial, que contorsionan la forma y en ella dejan el vacío más espantoso? ¿Era un delicado sentimiento de repulsión por el espectáculo, nuevo ante sus ojos, de miserias, de envidias, de pequeneces que lian entrado por desgracia, o se han desarrollado más en nuestro mundo literario? Nada de esto fué en mi concepto, sino fatiga del mundo, convencimiento de que la gloria es nubecilla dorada que presto se disipa, de que todo en la vida es nada, excepto el amor, que a ella le fué negado.

Nombrada académica desde que se fundó la Corporación que hoy edita sus obras, cortésmente dió ella las gracias; pero jamás tuvimos el gusto de verla entre nosotros. Su resolución de retiro absoluto era iumutable. La Academia supo respetar, deplorándola, esa resolución y dar una prueba a la poetisa del alto honor que era para aquélla tenerla en su seno. Por disposición reglamentaria cesan de ser académicos los que dejan de asistir a diez sesiones consecutivas. Tras mucha tolerancia, llegó la hora de acatar el reglamento, y varios fueron separados; pero ante el nombre de Nieves Xenes, los más reglamentaristas callaron: no se podía tocar a esa gloria de nuestra patria.

Gloria verdadera, y alta y pura. Cerebro y corazón de primer orden, carácter bien templado al fuego del dolor, si ante la poetisa no tiene restricciones nuestra admiración, ante la mujer que ella fué, no tienen restricciones nuestra veneración y nuestro amor.

II

Esas líneas escribí yo pocos días después de haber acaecido el fallecimiento de mi buena amiga. Más tarde se me han entre gado sus poesías para que las ordene en volumen y termine mi trabajo.

Cuando Cuba tenga su diccionario geográfico... Mas no; resultaría demasiado diminuto, ya que no es ella, ni lleva trazas de llegar a ser jamás, isla conquistadora, a usanza de las islas británicas, que de pobrísimo origen se han encumbrado a de tentadoras del mundo. Digamos, pues: cuando Cuba figure en algún diccionario geográfico americano con extensión no mezquina, será preciso que se haga espacio a un modestísimo pueblecillo de la provincia de la Habana: Quivicán, para consignarle alto honor en estas sencillas palabras expresado: Cuna de Nieves Xenes.

Ella nació en sus inmediaciones, en la finca rústica Santa Teresa, que en arrendamiento tenían sus padres, don José Xenes (1) y doña Asunción Duarte; y acaeció el fausto suceso el día 5 de agosto de 1859. Cuando contaba diez y nueve años, después de larga estancia en La Esperanza, otro fundo, propiedad éste de los esposos, sito en Aguacate, vino la familia a establecerse en la capital, de donde ningún miembro ha salido después. Nieves no conoció del mundo más que su patria, y amóla con ternura, exenta—no hay que decirlo —de los chillones alardes que después del triunfo se han introducido entre nosotros. Para ella no había más flores que las de Cuba, no había más beldades que sus compatriotas; no había más héroes que nuestros hombres; y cuando el canto vino a sus labios, espontáneo, casi sin influencias literarias externas, todo eso fué lo que cantó. Su culto apasionadísimo por la belleza, se complació en trazar retratos de mujeres, bellas como diosas, y uno varonil, en el que aparece su alma, extática ante el palpitante Apolo.

Cantaba, he dicho, casi sin influencias literarias externas. La única que a mi juicio puede señalarse es la de Campoamor, sentida entonces por todos los poetas de habla española, ya que nadie escapaba al encanto de sus Pequeños poemas. Esa influencia se advierte en los lindos serventesios, de pensamiento delicadísimo y de maravillosa intuición femenina, El primer beso; en Una carta, que recuerda la famosa de aquel autor en El tren expreso; se advierte también en El Sultán y el poeta, remembranza quizás de la dolora en que son protagonistas Diógenes y Alejandro; y en algunas otras. En su familia no había antecedentes poéticos apreciables. Sin herencia de ese género y sin disciplinas literarias, todo: inspiración, sentimiento, gusto depurado, elevación, oído poético exquisito, cuanto se necesita, en fin, para que una lira sea en las manos que la sostienen, no un bonito juguete, sino un brillante trofeo, todo tuvo que crearlo en Nieves la naturaleza. Pero ésta fué para ella pródiga, exuberante, verdadera naturaleza tropical. La favorecida correspondió al regio presente dedicando a aquélla himnos fervientes. Para saldar su deuda de gratitud hubiese bastado Julio, el gran soneto en que describe toda su magnificencia; pero hay más: hay Primaveral, de aproximada pujanza; hay los sáficos A la luna, de tan apropiada suavidad, y que nadie pensaría producto de los quince años y de campesina vida; las lindísimas espinelas A un rosal, Día de primavera, Marina, A un árbol... Y así, tal como hija legítima de la naturaleza, cantaba ella: como muchacha que vaga por los campos, con guirnalda de olorosas maravillas, por sus propias manos enhebradas; como un pájaro, como el mar, como los ríos, como las selvas. Márcase siempre la pausa al final de verso; no usa transposiciones, ni apenas metáforas, ni iteraciones, ni figura alguna retórica. La estructura de sus versos es siempre conocida; no la preocupan nuevas combinaciones métricas. Con la intuición de su fuerza ingenua y pura, desdeña, o simplemente olvida todas esas galas. Pero así y todo, aun más que a la naturaleza en sus aspectos plásticos, miraba a la naturaleza espiritual, miraba a las almas. Y era su mirada perspicaz y severa. Ni aun a la belleza se rendía si no estaba ennoblecida por el sentimiento, así Emma es para ella.
Hermosa estatua de marmóreo seno;
y la estulticia tras rostros hermosos érale completamente repulsiva. Por eso escribe en el álbum de Mercedes Matamoros —y es ésta una de sus más brillantes composiciones— como un desahogo largo tiempo contenido, estas palabras:
Un álbum. Canta, Musa, y no reprimas
tus notas de recóndita tristeza,
que ahora no vas a desgajar tus rimas
a los pies de una estúpida belleza.
Ni perdonaba tampoco al talento, del que se mostró tan entusiasta y tan exenta de mezquinas pasiones, así en esa composición como en otra, de excepcional belleza también, dedicada a Luisa Pérez de Zambrana, si el decoro personal no lo acompañaba. Véase Recordando a Oscar Wilde; su desprecio por el poeta envilecido es profundo.

Y es que en Nieves todo era nítido. Su nombre parece un adivinado símbolo, en cuanto a eso; que, por lo demás, quien la ha conocido y ha leído sus poesías, o las lea ahora, no extrañará que vengan a mi mente estos versos, de autor anónimo para mí:
¡Engañoso Mongibello!
nieve enseñas, fuego escondes...
pero allí me detengo en la aplicación, porque a ella, que era la lealtad misma, no conviene lo demás:
¿qué harán los humanos pechos,
si saben fingir los montes?
Su pecho, urna era donde se guardaban joyas. Y, más que todas reluciente, la joya amor. Por eso, recorriendo el conjunto de sus poesías, han dejado en mí esta extraña impresión. He visto muchas brillantísimas estrellas en aquel límpido cielo; pero apareció la estrella Sol, y todas las otras fueron apagadas. La estrella Sol es Una confesión. Nadie que la ha leído la olvida, nadie puede olvidar ese torrente de lava que corre impetuoso como un Niágara, y como un Niágara, bellísimo también. Parece escrita de un solo impulso, en pocos momentos: el impulso arrollador de la pasión, que llega a su término derribando cuanto se le opone.

Allí está Nieves toda entera: amante hasta la locura: ella misma lo dice:
Pero ¿no comprendéis que es un delirio
hablar de todo eso al que está loco?
Todo eso era: deber, religión, sociales convencionalismos, gloria futura celestial a cambio de conformidad... Ella respondía: 
Pero ¿habrá alguna dicha allá en el cielo
comparable siquiera a un beso suyo?
Y acentúa:
Os digo que prefiero, delirante,
de mi loca pasión en los anhelos,
la dicha de mirarlo un solo instante
a la eterna ventura de los cielos!
Toda entera he dicho: amante hasta la locura, y contenida, no obstante, hasta el sacrificio. Por eso termina diciendo:
¡Ay, Padre! en vuestra santa y dulce calma
rogad a Dios que evite mi caída,
porque este amor se extinguirá en mi alma
con el último aliento de mi vida!
Después de escribir versos así, después de escribir —mucho más tarde, en 1907—el soneto Julio, bien se puede romper la lira; pero romperla era gesto demasiado violento para la apasibilidad de Nieves; y ésta no hizo más que abandonarla, sin cuidarse apenas de mirar por algunos momentos los laureles que seguían cayendo sobre ella.

Porque aquellos contemporáneos suyos, los que la contemplaron en su época de brillantes fulgores, jamás la han olvidado, y son ellos los que van depositando a cada momento esos laureles. Son los ilustres contertulios de Céspedes: son, Enrique José Varona, que siempre, en el obligado discutir, decía la palabra definitiva; Manuel Sanguily, pródigo en brillantísimas disertaciones; José de Armas, muy joven, que prefería callar, reconcentrando para más tarde tesoros de saber; Juan Ignacio de Armas, delicioso poeta (permítase que nombre también a los que ya no existen); Luis Victoriano Betancourt, poeta también, que llevaba heridas de patria en el alma nobilísima; Aniceto Valdivia, poeta de gran numen, que, generoso, complacíase en recitar de manera portentosa ajenos versos; Francisco Calcagno, autor ya del Diccionario Biográfico Cubano, único que hasta la fecha tenemos; Pichardo y Catala, inteligentísimos directores de El Fígaro, que en ese año mismo había comenzado su hermosa carrera; Benjamín de Céspedes, fogosísimo batallador; Fornaris, poeta favorito durante mucho tiempo, y ya por entonces próximo a su terrible final de vida... Otros muchos, que no puedo recordar.

En aquel selecto areópago surgía Nieves, modesta, llena de naturalidad, y recitaba, como si nada dijese, versos que se bañaban allá, muy adentro, en lágrimas y en sangre. No he podido olvidar el último de estas estrofillas:
Ese luctuoso velo de tinieblas
el dia rasgará con sus albores,
cuando su faz el sol por el oriente
fúlgido asome.

No hay sol que las tinieblas de mi duelo
disipe, derramando sus fulgores;
en el triste desierto de mi alma
siempre es de noche.
Noche de tumba. El amado en la tumba es una obsesión, que, cuando deja de ser tempestuosa, persiste y se hace sentir en toda su obra como leve rumor de sauce, como gemido de tórtola, como ola mansa que vuelve incesantemente a depositar en la playa sus menudas espumas; como un leitmotif, que siempre, tristísimo, retorna.

El tiempo, con su acción sedante, la llevó a beatífica resignación. Ella, que con tanta frecuencia hablara del beso de amor, y que tan ardientes frases le dedicara, llegó a estampan estas melancólicas y dulces palabras:
Como a la altura del sueño
la realidad nunca está,
el mejor beso es el beso
que se anhela y no se da.
Rodeóse entonces de niños y de flores. La sonrisa demoró por más instantes en sus labios. Hízose amar de cuantos cerca de ella estaban, y cuando sus magníficos ojos, negros y dormidos, que abismos de pasión y de ensueños parecían, quedaron definitivamente cerrados, otra tumba, que muy anhelada había sido por quien tenía que ocuparla, abrióse por fin, y a ella fué a desintegrarse —no hablemos de irrisorios descansos —la egregia sombra—no otra cosa somos que sombras—de la martirizada, dulcísima criatura, de la gran poetisa cubana Nieves Xenes.



Aurelia Castillo de González.
Octubre 10 de 1915.










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(1) Era el Sr. Xenes, sobrino segundo del venerado don José de la Luz y Caballero.


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Texto tomado de:
Anales de la Academia Nacional de Artes y Letras. Tomo I (Enero - Marzo 1916). Imprenta de Aurelio Miranda. La Habana, 1916.

Sunday, April 2, 2023

Marius Petipa: Maestro de ballet, coreógrafo y bailarín francés (por Florencia Guglielmotti)

Nota del blog: Sección semanal dedicada al Ballet y la Danza, a cargo de la la ballerina, coreógrafa y profesora Florencia Guglielmotti .

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Retrato de Marius Petipa, a los 9 años de edad,
en su debut como Savoyard, La Dansomani (1827)
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Alphonse Victor Marius Petipa, nació en Marsella, Reino de Francia, el 11 de marzo de 1818. Sus padres eran bailarines: Jean Antoine fue solista y profesor y, su madre, Victorine Grasseau, destacó en roles de carácter, como gran trágica del ballet. Fue fundamentalmente la influencia materna lo que le acercó al estudio de la danza y del violín, desde su niñez.

Marius Petipa fue un gran apasionado de las danzas tradicionales españolas, sobre todo las andaluzas, tal como lo demuestran sus ballets Don Quijote y Paquita (ballet que eligió para su presentación en San Petersburgo), ambos con fuertes reminiscencias españolas. Descolló en los pasos de carácter e introdujo a la polca en la escena del ballet.

Tras debutar en Bruselas en 1838, se perfeccionó con Auguste Vestris (bailarín francés, 1760-1842) y actuó por toda Europa como primer bailarín. Casi una década después (1847), tras haber pasado una temporada en París, decidió viajar a San Petersburgo, en donde trabajó durante 60 años. En ese período creó 55 ballets, realizó 21 ballets en colaboración y 37 coreografías para diversas óperas.
En 1858 fue nombrado maestro de baile del Ballet Imperial ruso, iniciándose su época más productiva. Aquí surgen las tres obras supremas de su carrera, todas con música de Piotr Ilich Tchaikovski: “El lago de los cisnes” (en colaboración con Lev Ivanov), “La bella durmiente” y “El Cascanueces”, que hasta el día de hoy forman parte del repertorio de todas las grandes compañías de ballet. A este período corresponden también las obras realizadas sobre partituras de Aleksandr Glazunov: “Raymonda”, “Las cuatro estaciones” y “Astucias de amor”.


El arte de Petipa estuvo marcado por el rigor técnico, la riqueza de medios y un sentido de la elegancia que huía de todo virtuosismo y de cualquier espectacularidad pomposa. Detestaba el acrobatismo de la escuela italiana y el lujo desanimado del tardío ballet francés. Intentó conservar y enriquecer la herencia romántica, llevando la tradición a sus más altos niveles. Reformó el papel del bailarín masculino y dio corporeidad diferenciada al hombre y a la mujer, de modo que se explotaran al máximo las propiedades anatómicas y enérgicas del bailarín. También, suprimió la figura del favorito (o favorita), tratando a todos con igualdad. En la redacción de sus coreografías era minucioso y científico, e iba escribiendo en una libreta las diversas evoluciones que la partitura exigía, incluyendo retratos y perfiles de las actitudes que imaginaba en los diversos personajes. El momento cúlmine de cada una de sus obras era el pas de deux entre los protagonistas, que empieza con un adagio a cargo de ambos bailarines, continua con las dos variaciones, una para ella y una para él, y acaba con un nuevo dúo, la coda, técnicamente muy exigente, que se resuelve en una pose entrelazada y estatuaria. Así pues, Petipa unió la tradición de la velocidad italiana con la herencia del elaborado adagio francés. Desde el punto de vista formal, el cambio en el rol del bailarín y la introducción del pas de deux como parte obligada de cualquier ballet, fueron los dos grandes aportes de Petitpa al mundo del ballet, además de sus maravillosas obras.





 
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Florencia Guglielmotti reside en la Ciudad de Buenos Aires (Argentina). Es Profesora de Danza (titulada en la Escuela Nacional de Danzas "María Ruanova"), Licenciada y Profesora de Artes (recibida en la Universidad de Buenos Aires). Cursó estudios en la Escuela Nacional de Ballet de Cuba. Es Miembro de International Dance Council CID (UNESCO).
 
Actualmente se desempeña como Profesora de Danza Clásica y como Profesora Titular de Historia de la Danza en la Escuela Superior de Enseñanza Artística "Aída V. Mastrazzi". florenciagu@gmail.com

Restauran la antigua imagen del "Cristo de Guáimaro" para las procesiones de Semana Santa de este año

Fotos de Fidelito Cabrera, 
enviadas para el blog Gaspar, El Lugareño.
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La iglesia en Camagüey ha restaurado la antigua imagen de madera, del Cristo que se podía admirar en el museo religioso conocido popularmente como "las Catacumbas de La Merced", en el lugar que se ubicaba la cripta funeraria debajo del altar mayor de La Merced. El museo de arte religioso fue creado por Mons. Sarduy Marrero (epd), quien lo inauguró en el año 1981. 

La restauración de la imagen ha estado a cargo del joven artista Alejandro Jesús González, de la parroquia del Cristo, con la asesoría de Fidelito Cabrera. Alejandro se destaca por la creación de figuras religiosas, como Nacimientos, o la Virgen de la Caridad que salió en procesión el pasado año 2022. Proyectos que también contaron con la colaboración de Fidelito Cabrera. 

La imagen se encontraba deteriorada por el paso de los años, y la humedad del lugar donde se encontraba. Entre otros daños, había perdido los ojos y le faltaban seis dedos. 

Además de sus valores artísticos, este Cristo de madera, tiene un gran valor histórico, pues originalmente perteneció a la Iglesia de Guáimaro, construida en el año 1789 e incendiada por los mambises en el año 1869. cuando le prendieron fuego al pueblo para evitar que fuera tomado por las tropas españolas.

El historiador Desiderio Borroto Jr. ha escrito de manera detallada la historia del origen de la imagen del Cristo, por lo que comparto textualmente  su narración:

Esa talla en madera de la imagen de Jesucristo perteneció originalmente a la Iglesia La Concepción de Guáimaro, levantada en 1789 por el franciscano fray Gregorio de Jesús Caballero y Miranda, el mismo que se considera fundador de la villa guaimareña y al que se le atribuye haber llevado a la parroquia la imagen tallada en madera de Jesucristo que acompañó a los feligreses hasta el año 1869, aquel año Guáimaro fue la sede  la Asamblea Constituyente y desde el mes de noviembre del año anterior era una villa mambisa pero el 10 de mayo y ante la posibilidad amenazante de que la cuna de la República cubana y la nación cayera en manos españolas, sus habitantes decidieron incendiarla y “salvar del enemigo, por el fuego, al pueblo sagrado, y darle ruinas donde esperaban fortalezas” como apuntó El Apóstol en su artículo El 10 de Abril.

Las llamas redentoras se expandieron por toda la villa hasta la Iglesia que sufrió daños y una parte de su mobiliario y otras reliquias perecieron bajo las llamas, entre esas reliquias estaba la escultura tallada en madera de Jesucristo traída al templo por Fray Gregorio de Jesús Caballero y Miranda, quizás la imagen más antigua que se conservaba en la Iglesia, al retomar los españoles las ruinas de la villa, los capellanes del Ejército Español que atendieron la parroquia por casi diez años, llevaron para Puerto Príncipe la talla en madera algo chamuscada  y fue depositada en La Merced.

Desde entonces, 1869, y hasta ahora ha sido cuidada, conservada y en estos días restaurada. Su esplendor podrá ser apreciado por todos los camagüeyanos en las procesiones de esta Semana Santa. 

Conozco del deseo de los guaimareños por tener su imagen de regreso en su parroquia. Creo que ahora, ya restaurada, y luego de la Semana Santa, es el momento perfecto para que el "Cristo de Guáimaro" regrese a su casa. (JEM)


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La imagen antes de ser restaurada.
"Catacumbas de La Merced"

Saturday, April 1, 2023

Las crisis: periodos difíciles en la vida (por Orlanda Torres)

Nota del blog: Sección semanal en el blog Gaspar, El Lugareño, gracias a la cortesía de la psicóloga Orlanda Torres, quien ha aceptado la invitación a compartir con los lectores sus consejos y reflexiones sobre los conflictos cotidianos.


La mayoría de las crisis tienen connotaciones negativas e implica que tengamos que vivir periodos difíciles en nuestra vida. Conocemos que las crisis vitales son aquellas que surgen de forma inesperada de manera repentina y nos obligan a tomar decisiones inmediatas que en ocasiones se hacen difíciles de elegir.

Y existen las crisis circunstanciales que son aquellas originadas por un hecho que las precipita como un divorcio, muerte, enfermedad desastre natural etc.

Algunas pueden durar periodos cortos, otras pueden durar largo tiempo que nos impiden seguir con nuestras habituales acciones diarias. Las más duras pueden lacerarnos, dejándonos huellas y en algunas ocasiones cicatrices que hacen que todo nuestro ser se movilice y cambiemos nuestra actitud y procedimientos, haciéndonos seres más fuertes.

Este evento hace que nos saquemos la capa externa y construyamos una nueva para protegernos, este estremezón hace que te adaptes y aceptes muchas cosas que antes no las considerabas importantes en tu vida. Pasas a otro nivel.

Las crisis son pruebas que nos hacen sentir que estamos desamparados, desprotegidos, huérfanos y fragmentados. Es ahí donde empiezas a redescubrir formas y estrategias para rescatar tu “yo”.

Entonces empiezas a movilizarte para hacer cambios y reinsertarte nuevamente en el engranaje de la vida y en algunos casos tener que aceptarte como una nueva persona, debido a las alteraciones sufridas por la crisis que dejó huellas en tu ser.

Una crisis puede romper ilusiones, sueños y hacer que tu vida de un giro sorprendente, pero lo más interesante de todo esto, es cómo vamos canalizando, aceptando y adecuándonos ante estos acontecimientos abruptos.

Es un reto más de la vida que nos pone a prueba y nos obliga a adaptarnos al nuevo escenario donde nos tocará vivir.

En muchos casos empezamos asumir mejor los hechos y tenemos una percepción más clara de la vida y aceptamos que nada es estático, que la vida es cambio constante y que, aunque no todos estamos preparados para sucesos inesperados, tenemos que tener en claro que siempre debemos estar atentos y saber que mientras estemos vivos, la vida puede sorprendernos en cualquier momento y debemos encarar los sucesos de la mejor forma para poder convertirnos en mejores seres humanos.






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Orlanda Torres: Psicóloga, Escritora, Educadora, Orientadora Motivacional.

Autora de los libros: "Volando en Solitario" año 2015, Guayaquil - Ecuador. (Disponible en Amazon Kindle). "Los símbolos del Amanecer" (Editorial Voces de Hoy, 2020)

-Estudió en Miami Dade College: Certificate of Florida “Child Development Associate Equivalency”. Maestra de Educación Preescolar e Infantil en la ciudad de Miami.
-Licenciada en Psicología graduada en el 02/2017 - Atlantic International University.

-Orientadora Motivacional y Conferencias pueden contactar a Orlanda Torres a través de la página que administra www.fb.com/vivencialhoy

Publicaciones en Revista Sapo - Santiago de Chile – 2016
-La Estancia en el Paraíso de los Sueños
-Relación de Pareja y su gran Desafío
-Es la Felicidad una Elección

Conferencia en Radio - Miami, Florida
-Positivo Extremo Radio: Entrevista 123Teconte “Regreso a Clases y La Adolescencia”
-¿Como aprender a ser feliz?- Edificio Trade Building-.Innobis Coworking, Guayaquil - Ecuador
-La Inteligencia Emocional en la Relacion de Pareja- WENS Consulting Group, Guayaquil - Ecuador
Publicaciones en Revista Sapo - Santiago de Chile – 2018
- Ser Mujer

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